Centro Social y Cultural
Luna, Zaragoza, 1988
La casa de Cultura es un equipamiento público destinado a la acogida y fomento de actividades sociales y culturales. El solar sobre el que se emplaza está en la parte baja del pueblo, en un espacio amplio surgido espontáneamente a modo de plaza-explanada junto a la carretera, con edificaciones recientes y heterogéneas. El edificio se concibe atendiendo a las condiciones del espacio urbano en el que se sitúa y a su emplazamiento concreto, para dar respuesta al programa, que acoge una sala de usos múltiples, una biblioteca, salas de reuniones y de estudio y una cafetería. El proyecto responde al carácter singular del edificio en una posición de fachada del casco histórico, atendiendo a la escala doméstica del entorno inmediato, y a la escala propia, que se relaciona con la de los edificios monumentales, palacios e iglesias que se conservan en el pueblo. Los pliegues y retranqueos del volumen tratan de adecuar cada fachada a su contexto, matizando el apoyo y la base de un edificio de volumen compacto y relativamente grande. El ladrillo utilizado y su despiece en bandas horizontales contribuyen a la integración del edificio en el conjunto urbano